En el comunicado 1977 que
emitió hoy por la mañana el Ayuntamiento de Xalapa,  el Presidente Municipal  Lic. Américo Zúñiga Martínez  declaró que cayeron en la tarde del domingo
pasado 64 mm de agua de lluvia en dos horas,   y que a esto 
se sumó  toda el agua que cayó
sobre la microcuenca  del río Carneros.
Todo esto   de inmediato hace pensar lo siguiente ¿cuánta cantidad de agua será esa?
Pues bien, para poder saber
cuánta agua de lluvia cae sobre algún lugar   existen
los milímetros de agua ( mm) , que no es otra cosa que la altura en milímetros que
registra un pluviómetro.  En su forma más
rudimentaria y para poder comprenderlo más fácilmente, pensemos en  un cubo cuyos lados ( ancho, largo y altura )
miden lo mismo 1m; o sea 1m3 ( un metro cúbico), pero cuya altura es la más importante
pues  es la que nos daría la medida y tendría
una escala de 1000 mm ( 1 m). Cada litro de agua de lluvia  que entre en ese cubo sube de nivel 1mm. Por
lo tanto y de manera más directa, se dice que   1mm equivale
a 1 litro de agua que cae sobre un área de 1 m2. Luego entonces, la tarde del domingo
pasado cayeron 64 litros de agua de lluvia por cada metro cuadrado en
un tiempo de 2 horas.
Si 
ahora que ya sabemos que por cada metro cuadrado cayeron 64 litros de
agua de lluvia, imaginemos la enorme cantidad de agua  que cayó en un espacio de por ejemplo  1 hectárea; pues esto son  aproximadamente 640 000 lts. Y si ahora calculáramos
la cantidad de agua que cayó en toda la cuenca del río Carneros, simplemente diríamos
que literalmente se cayó el cielo sobre la zona poniente de la ciudad de
Xalapa, en un tiempo relativamente corto. Esto hace imposible que el agua que escurre desde la parte alta del
Carneros  logre pasar sin salirse de su cauce,
y menos por un área tan pequeña como lo es el embudo que se forma al llegar al
puente que comunica a San Bruno con  el
camino que lleva al Barrio de la Luz. 
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| *Camino Antiguo del Molino de Pedreguera hacia el "Barrio de la Luz". Xalapa, Veracruz | 
Cuando leemos las noticias sobre las
inundaciones en la parte poniente de Xalapa , los periódicos siempre mienten al
decir que la inundación fue en el Barrio de San Bruno. Y digo mienten porque  la parte donde se inunda históricamente ya no
pertenece al barrio; ese lugar ya forma parte del camino antiguo hacia Tlalnelhuayocan
y al  Barrio de la Luz. Hago mención de
esto porque   las colonias Francisco
Ferrer Guardia (1921) y Obrero Campesina (1957) jamás se han inundado, pues
éstas fueron creadas a partir de ampliaciones urbanas perfectamente
planificadas  por el departamento agrario
de aquellas épocas. Las colonias que rodean al 
barrio mágico de San Bruno  fueron
en su mayoría el producto de una inexistente planificación urbana  por parte de las autoridades municipales desde
hace   al menos 
40  años.
Entre autoridades  indolentes, líderes sociales corruptos, ejidatarios
deseosos de vender y colonos  amolados
urgidos de vivienda; pues oiga usted, las condiciones no estaban de mejor
manera para poblar hasta por  encima de
cerros,  represas y cauces de  ríos. Y es que basta con darse una vueltecita
por las márgenes del río Carneros para entender por qué se inunda la zona.
Las inundaciones en la Col. Montevideo y
adyacentes,  son consecuencia de la nula
visión que tuvieron nuestras autoridades pasadas  para entender la problemática que se iba a
generar y sí la perfecta agudeza para mirar el dinero que entraría a sus
bolsillos. Secaron la represa, permitieron construcciones cerca, a un lado,
junto,  en  y sobre el río. Imposible solucionar el
problema al cien por ciento  con la
primera etapa del “Colector Pluvial Fernando Gutiérrez Barrios”; sin duda alguna
habrá que esperar un poco más. Aunque el primer paso ya se dio, y eso  hay que reconocerlo. La
administración municipal hace lo que humanamente le corresponde  y lo digo no por tratar de eximir  su  responsabilidad,
sino por el esfuerzo que se nota a leguas 
por tratar de ayudar a las desafortunadas personas que viven al margen
de este rancio arroyo. El problema de las inundaciones no las originó esta administración,
culparlos sería un error. La culpa fue de todos, eso que ni duda quepa, ahora
el problema tendremos que enfrentarlo juntos y quien sabe por qué tiempo más. 
* Fotografía proporcionada por el Arquitecto Jorge Flores Martínez. 
