28 de agosto de 1924, 94 años

Inocencio Castañares 

Apenas acierta el pensamiento, a la vez trémulo y apasionado, a dejar para después la lectura reposada de las amarillentas hojas de historia del barrio de San Bruno.

Hurtaré unas palabras del Papa Francisco que más o menos enseñaban así: “la juventud es la que debe de continuar la tradición, que no se corrompa” Esa debe ser nuestra aspiración, prolongar en el tiempo la pesquisa de la esencia de este terruño, al cual verán crecer por su propio peso específico. Todos somos historia.

Ese fue apenas el primer éxito, atribuible plenamente al cronista del barrio Ignacio Lara, historiar la historia. Fue su idea re-crear la leyenda. Ojos aviesos hurgando en la prenda tersa de la comunicación de quienes han sido actores en el arrabal, para rescatar el diamante de la entraña nativa. ¿El instrumento? Voces, textos, las añosas construcciones, todo en un cofre ordenado como el universo.

Un blog, lo que parecía una modesta dirección en la internet, aparece ahora preñada de la sabiduría que han transmitido esas voces, esos textos… los edificios. Quienes han escrito en ese invento de la humanidad pueden estar orgullosos de su aporte, todo esfuerzo merece un premio, sin embargo, es menester reconocer a quienes sin tapujos han prestado recuerdo de lo vivido.

Pero no desvariemos, el título tiene una razón: vamos a celebrar ese aniversario este cercano 28 de agosto, el primero que celebramos fue la conmemoración número noventa, apenas estábamos en pañales pero ya se vislumbraba un filón de vida pasada y presente, pues el blog le ha dado cabida a lo que hemos podido alcanzar.

Con el mejor deseo de no pecar, nos atrevemos a decir que el primer esfuerzo histórico se debió a la pluma de un grupo de obreros de la fábrica y, consecuentemente, miembros del Sindicato, así con mayúsculas. Una verdadera fuente de sabiduría en la que abrevamos. Aquí vale la pena recordar esa frase de Zubizarreta: “Un libro es como un amigo fiel, se entrega entero cuando lo abrimos, y cuando lo cerramos sabe esperar”.

También nos atrevemos a mencionar en segundo lugar el libro sobre tema similar que envió a la imprenta la maestra Olivia Domínguez, historiadora de a deveras, quien se ha convertido en una grata presencia entre nosotros.

Finalmente… ¡¡¡ EL BLOG DEL BARRIO DE SAN BRUNO EN XALAPA !!!

A ver qué barrio ha abierto sus entrañas como éste. Tres testimonios innegables. Sí señor.